China es desarrolladora de grandes inventos que van desde el papel, la brújula y la pólvora hasta el cepillo de dientes

 



Por Cendoesch. 


China es uno de los países en desarrollar grandes inventos a través de la historia que influyeron en el desarrollo de la comunicación, la cultura, el arte, la ciencia y la tecnología de las demás naciones. Uno de los proyectos que ha contribuido de manera especial en la evolución humana como fuente de escritura, es lo que hoy se conoce como el papel, creado en la nación asiática en el año 105 d.C. por Cai Lun, consejero del emperador He de Han.


Según informaciones suministradas por el diario BBC NEWS Mundo, Cai Lun, encargado de la fabricación de instrumentos y armas con el título de Shang Fang Si, ideó el papel elaborado a base de corteza de árboles, restos de fibra de cáñamo, retazos de tela y redes de pescar, resultando una lámina más liviana y resistente. Asimismo utilizó formas de impermeabilización, usando encolados a base de almidón de arroz, mezclándolos con agua, los golpeaba con una herramienta de madera y luego derramaba esta mezcla sobre una pieza plana de tela gruesa tejida, logrando un efecto de satinado que protege los documentos de los parásitos y el moho.


La técnica implementada por Cai Lun para la fabricación del papel, en base a conocimientos antiguos, es utilizada por las grandes industrias de fabricación  del material. Aunque las máquinas actuales se distinguen de las herramientas de la China del año 105, la industria continúa la antigua técnica de fabricar con la pulpa láminas de fieltro, suspendidas en agua, para después drenar y proceder al secado, consiguiendo así una lámina de papel delgada.


Por otra parte, China impacta con el descubrimiento de la pólvora en el siglo Xl, tras  buscar una fórmula que provocara la inmortalidad, mezclando el nitrato potásico, carbón negro y azufre -las fuerzas militares chinas utilizaban armas basadas en la pólvora y explosivos-. Además se utilizaba para la medicina, virtudes curativas que fueron pronto superadas por utilidades bélicas, finalmente los mongoles y los árabes contribuyeron a expandir el nuevo invento por el mundo, cuando descubrieron la utilidad que tenía en la guerra.


Asimismo, el país continuó sus descubrimientos con la invención de la brújula, un aparato de orientación que utiliza una aguja imantada para señalar el norte magnético terrestre, inventada en el siglo XI, descrita en el libro Louen Heng, donde registra el encuentro de brújulas de aguja flotante o pivotante, mientras el instrumento no existía en Europa.


La brújula hizo posible más de siete  travesías de importantes flotas dirigidas por Si Zheng He, de la dinastía Ming, mayor explorador marítimo chino de la historia, y el más importante en Asia. Años más tarde, el ejército chino utilizó una brújula para orientar la navegación en el siglo Xl y para la orientación naval en el Xll; las brújulas estaban entonces hechas de hierro magnetizado en lugar de piedra caliza, que consistía en un pez de hierro magnetizado que flotaba en un cuenco de agua y apuntaba hacia el sur. 


Del mismo modo, el invento de la imprenta aunque se le atribuye a Gutember en el año 1450, lo cierto es que según datos ofrecidos por Tapei Economic an Cultural Office in Miami, le corresponde a Bi Sheng, un plebeyo chino que inventó  la imprenta con tipos móviles en el siglo XL, cuatro siglos y medio antes que johannes Gutenberg inventara su imprenta del tipo móvil, además registra el  descubrimiento de la reproducción de una bandeja de cobre con tipos móviles de madera, en donde se imprimían los antiguos libros chinos. En este sentido, el Shinchlin o Compendio de Historia, fue uno de los primeros libros impresos en China.


De igual manera, para lograr la impresión los chinos  colocaban en una bandeja de cobre, sobre una capa de cola, los tipos. Cuando se terminaba de armar el texto, se calentaba la bandeja y al derretirse la cola, se presionaban los tipos con una plancha de madera plana para lograr que todos quedasen en el mismo nivel. 


Otro proyecto entre tantos que ha desarrollado la nación asiática,  es el cepillo de dientes, un instrumento de gran utilidad e higiene. Desde los años 619 y 907, los chinos utilizaron los primeros protocepillos dentales, fijando pelos gruesos de jabalí o cola de caballo en mangos de bambú, hueso o marfil.  Más adelante los cepillos de dientes de cerdas chinas  llegaron a Europa  y se extendió su uso por todo el continente.


En la actualidad, el país  revoluciona el mundo en ciencia y tecnología con la construcción del sol artificial, conocido como HL-2M, un reactor de fusión de tipo tokamak ubicado en el Southwestern Institute of Physics (SWIP) en Chengdu,  el reactor imita el proceso de generación de energía del Sistema Solar terráqueo, aplicando potentes campos magnéticos al hidrógeno hasta comprimirlo lo suficiente para formar plasma, que puede alcanzar altas temperaturas de más  de 150 millones de grados Celsius.


De igual forma,  avanza en la construcción de grandes aviones de pasajeros y vehículos electrónicos, mientras que sus industrias implementan estrategias para el desarrollo  en la economía digital, el 5G y  6G.


Desde el 2019 China es el país que lidera en solicitudes de patentes al superar a los Estados Unidos quien estaba a la cabeza desde que se creó la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual  (OMPI), una dependencia de las Naciones Unidas. A partir de ese año el país asiático ha ido aumentando la cantidad de solicitudes de patentes, ampliando su diferencia con los estadounidenses, pues mientras en el 2019 fue de mil solicitudes, en 2021 el número se elevó de 10 mil, ya que la cifra de los chinos alcanzó las 68, 720 mientras que las de Estados Unidos llegó a  59, 230     


Finalmente, China  es sin lugar a dudas, uno de los primeros países en desarrollar importantes descubrimientos que a través de los tiempos han facilitado y desarrollado la vida de la humanidad, convirtiéndose en uno mayor benefactor de los grandes inventos. 






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